La televisión a debate

AnaAlejandre Las diversas cadenas televisivas han encontrado una fórmula barata, sencilla, eficaz y siempre renovable como las energías ídem, que no es otra que los debates, tertulias, charlas, coloquios, mesas redondas, o como quieran llamárseles en cada ocasión, según la cadena de televisión en cuestión, a los programas en los que un grupo de invitados de distintas ideologías se sientan ante las cámaras para hablar de todo lo divino y lo humano, sobre todo de lo humano en cuanto se refiere a la política, la mayoría de las veces, de manera distendida y, en otras ocasiones aunque son las menos, con bronca incluida y salidas del plató de algunos de los participantes con actitud airada por algún comentario, crítica o supuesta ofensa que le han inferido alguno de sus oponentes que no se retracta ni pide disculpas, provocando así la marcha del tertuliano ofendido. Estas situaciones son las menos, afort...