Mercado de vidas humanas

Mercado de vidas humanas Ana Alejandre Cualquier programa de televisión, aunque también se da en la radio pero en menor medida, ofrece continuamente la imagen de esos seres desgarrados y excéntricos -como el título de un excelente libro de Juan Manuel de Prada hablando de otras cuestiones más literarias y menos indignas-, que venden su intimidad, su dolor, su tragedia, a veces, o su simple impudicia, para narrar con todo lujo de detalles sus intimidades, sus vergüenzas, sus procacidades, en muchas ocasiones, en una demostración evidente de su propia y absoluta falta de respeto por sí mismos y la carencia de autocrítica que le impediría, en caso de tenerlos, recurrir a esos medios para contar por unos cuantos euros lo que sólo debería permanecer en su más estricta intimidad. Lo más indignante de todo esto y lo que produce mayor vergüenza a cualquier espectador con un mínimo de sensibilidad y dece...